AGENDA
21 / 12 / 2020
Fiestas de fin de año es un periodo alegre, de celebración, eventos en los cuales generalmente hay reencuentros con seres queridos, amigos, amigas y la familia. Además suele ser un periodo que genera mucho estrés y a veces síntomas depresivos como cansancio, desmotivación y tristeza. Lo anterior se puede vincular con la angustia que emerge al reflexionar acerca de nosotros mismos y el entorno en que vivimos, reflexionando acerca de cómo son nuestras relaciones, como fue nuestro año, que objetivos cumplimos, que anhelos no. Esto suele ocurrir, pero no necesariamente de forma consciente, sino que las fiestas de fin de año nos interpelan como personas en los distintos ámbitos en los que nos desempeñamos.
Este año se debe agregar el contexto de crisis sanitaria debido a la pandemia que azota el país y al mundo, por lo que este fin de año será muy distinto a los anteriores, existirán diversas limitaciones y se requiere de flexibilidad para adaptarse a esta realidad. Por esto es aconsejable ajustar nuestras expectativas a la situación en que estamos, ser realistas, planificar de antemano que haremos esos días y aceptar los sentimientos de frustración, impotencia o rabia, duelo si ha fallecido alguien cercano por la pandemia, así como también pueden surgir sentimientos positivos de gratitud por estar sanos.
Por otro lado, resulta especialmente difícil no compartir con todos los integrantes de la familia y/o amistades, con quienes deseamos estar y en ese caso puede ser bueno compartir los propios sentimientos con personas cercanas.
Por último, hay que estar muy atento a nuestras emociones, y si aparecen síntomas de que podemos estar cursando una depresión, ideación suicida o consumo problemático de alcohol, hay que consultar con un especialista.