El Centro de Energía y Desarrollo Sustentable y las Facultades de Ingeniería y Ciencias y de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales realizaron el seminario “Los desafíos de la transformación hacia la movilidad urbana sostenible”, el día 12 de julio.

En él se dio a conocer un estudio reciente de la UDP que entrega aportes para el debate de políticas de desarrollo de largo plazo de la movilidad urbana sostenible, y fue comentado por un panel diverso de expertos para debatir sobre algunos de los aspectos centrales de esta necesaria transformación. En el panel participaron Claudio Seebach, Presidente Ejecutivo de la Asociación de Generadoras de Chile, Carlos Cruz, Secretario Ejecutivo del Consejo de Políticas de Infraestructura y Genaro Cuadros, Director del Laboratorio Ciudad y Territorio.

Además, contó con palabras al cierre de la ministra de Transporte y Telecomunicaciones, Sra. Gloria Hutt.

La movilidad es un componente fundamental de la calidad de vida de los habitantes de las ciudades. El problema de la movilidad urbana se ha vuelto progresivamente más difícil con el crecimiento de la población, la tasa de urbanización y la complejidad de las urbes en sociedades cada vez más diversas.  Solucionar las necesidades de las personas de movimiento por razones laborales, recreativas, educaciones, sociales o de salud ha generado conflictos crecientes por el uso del espacio, así como externalidades e impactos sociales y urbanísticos.

Algunos estudios revelan una situación particularmente difícil y paradójica en los países en desarrollo: mientras el crecimiento económico trae acompañado un conjunto de beneficios en términos de calidad de vida, como acceso a bienes de consumo relevantes, mejor educación y salud, en el transporte la situación tiende a ser opuesta; mayor crecimiento económico trae más problemas.  Este fenómeno pareciera ser una tendencia clave de nuestros tiempos, por lo que la proyección futura de los problemas urbanos no puede sino agravarse de no mediar cambios significativos. Esto ha llevado a reflexionar sobre la necesidad de acercar mucho más el transporte a los esfuerzos de desarrollo sustentable y, en particular, a relevar el rol crucial que cumple la movilidad en el logro de los Objetivos del Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.