AGENDA
07 / 10 / 2020
En la actual contingencia han surgido varias interrogantes en torno a la prevención y contagio del Covid-19, así como los distintos efectos de la pandemia. La Dra. Patricia Muñoz, decana de la Facultad de Medicina, la Dra. Pamela Aránguiz, dermatóloga y Katia Fernández, académica de la Escuela de Tecnología Médica, responden algunas de estas dudas.
¿Por qué los niños se ven menos afectados por la COVID-19?
Responde la Decana de la Facultad de Medicina y pediatra, Dra. Patricia Muñoz:
En relación a los niños(as) la respuesta aún no está despejada y continúa en investigación. Algunos expertos sugieren que los niños quizás no se vean afectados de manera tan grave por la COVID-19 porque hay otros coronavirus que se propagan en la comunidad y causan enfermedades como el resfriado común. Como los niños con frecuencia se resfrían, tal vez su sistema inmunitario esté preparado para proporcionarles alguna protección contra la COVID-19. También es posible que el sistema inmunitario de los niños interactúe con el virus de una manera diferente a la que lo hace el de los adultos.
No obstante lo anterior, los niños de raza negra, con obesidad y los bebés muy pequeños, menores de un año tienen un riesgo ligeramente mayor.
Un nuevo estudio que fue publicado por el British Medical Journal (BMJ)estableció que los niños infectados de covid-19 sufren formas más leves de la enfermedad y confirma lo que ya se suponía sobre los efectos mínimos del virus en los niños.
¿Usar lentes protege del contagio de coronavirus? y ¿por qué?
Responde la académica de la Escuela de Tecnología Médica, TM Katia Fernández:
Según la literatura descrita y la experiencia, la puerta de entrada del Coronavirus (SARS-CoV-2 o COVID-19) es principalmente por nariz, boca y ojos. Por medio de contacto directo a través de las manos contaminadas, cosas o artefactos contaminados, y aerosoles o gotículas de saliva o estornudos que contengan las partículas virales.
El virus penetra a través de la mucosa ocular, ya que hay receptores en sus células, al igual que en la nariz y en la boca, que son reconocidos por el virus y así entra al organismo.
Es por esto que, junto con el lavado frecuente de manos y el uso de mascarilla para proteger estas puertas de entrada del virus, se debería usar protector facial, antiparras o anteojos, para proteger a los ojos. De esta forma, evitamos que las partículas virales entren por esta vía (es una barrera física que impide entrar en contacto con el virus y también evita que nos restregarnos los ojos o tocarlos con las manos sucias o contaminadas con virus).
¿El estrés post pandemia puede ser la causa de la caída del pelo?
Responde la académica de la Escuela de Medicina y dermatóloga, Dr. Pamela Aránguiz:
Sí, el estrés puede ser causa de caída de pelo, lo que se conoce con el nombre de alopecia. El estrés emocional o psicológico puede producir varios tipos de alopecia, uno de los más importantes es la alopecia areata, que se caracteriza por zonas circulares de pérdida de pelo, ya sea en el cuero cabelludo o en otras zonas del cuerpo (como barba y cejas). También hay otros tipos de alopecia que se manifiestan incluso 3 a 4 meses después de un evento estresante importante, ya sea psicológico o físico, como por ejemplo, una enfermedad grave, esto se llama efluvio telógeno.
En resumen, existen múltiples causas de alopecia, una de ellas es el estrés emocional, por lo que es importante consultar a un profesional si presenta alguno de estos cuadros, ya que el médico podrá descartar otras causas relacionadas y otorgar el tratamiento adecuado.